Cuando se invento la imprenta

La imprenta puede considerarse uno los grandes inventos de la historia de la humanidad. Su invención significo un gran avance para la cultura en el mundo, e históricamente es uno de los hechos que permiten dar por finalizada la Edad Media para pasar a la Edad Moderna. Pero concretamente, ¿Cuándo y quien invento la imprenta?

Historia de la invención de la imprenta

En la época antigua y la edad media los libros eran elementos muy raros en todo el mundo. Su realización era manual, y llevaba largo tiempo realizar copias, por lo que también eran sumamente caros. Por tanto, estos libros estaban reservados sólo a los estratos sociales más elevados o al clero. Esto hacia, que la mayoría de la sociedad era analfabeta y tenían unos conocimientos muy rudimentarios, sólo los propios de su oficio.

Antes de la invención de la imprenta, se hicieron bastantes aproximaciones con distintos nivel de éxito. En la época de los romanos, existían sellos que eran capaces de realizar copias en arcilla. En la alta Edad Media, se usaban tablillas de madera para copiar panfletos. En China también se hicieron algunas imprentas rudimentarias sobre papel arroz. Pero esto no era ni mucho menos suficiente, para realizar buenas copias de libros que pudieran masificarse para un amplio número de la población. Esto iba a cambiar en la Edad Moderna.

Quién inventó la imprenta

Gutenberg nació en Maguncia, Alemania, alrededor de 1398, y se convirtió en orfebre y herrero. En la década de 1430, comenzó a experimentar con la impresión de letras individuales en bloques de madera, que luego se podían unir para formar palabras y oraciones. Sin embargo, Gutenberg se dio cuenta de que esta técnica era demasiado lenta y costosa para producir libros a gran escala.

En su lugar, Gutenberg desarrolló una técnica de impresión de tipos móviles, que le permitió imprimir páginas completas de texto a un ritmo mucho más rápido. Su técnica implicaba tallar letras individuales en bloques de metal, que luego se podían organizar en líneas y páginas completas. Estos bloques de tipo móvil se podían reutilizar para imprimir diferentes textos, lo que hacía que la impresión fuera más rápida y eficiente que nunca.

En 1455, Gutenberg completó su obra maestra, la Biblia de Gutenberg, que se considera el primer libro impreso con tipos móviles en Europa. La Biblia de Gutenberg tenía más de 1.200 páginas y se imprimió en dos volúmenes. Fue un hito importante en la historia de la imprenta y marcó el comienzo de una nueva era en la difusión del conocimiento.

Aunque se cree que Gutenberg fue el inventor de la imprenta de tipos móviles, también es cierto que no trabajó solo en este proyecto. Contó con la ayuda de varios artesanos y técnicos, así como con el apoyo financiero de un rico comerciante, Johannes Fust. Sin embargo, a pesar de la colaboración de varios individuos, se le atribuye a Gutenberg el mérito principal de esta gran invención.

En conclusión, aunque no hay un solo individuo que pueda ser considerado como el único inventor de la imprenta, la mayoría de los historiadores están de acuerdo en que Johannes Gutenberg fue el principal desarrollador de la técnica de la imprenta de tipos móviles. Su trabajo en la creación de la Biblia de Gutenberg fue un logro notable y marcó el inicio de una nueva era en la difusión del conocimiento y la información. A día de hoy existe un museo en su ciudad natal, Maguncia, donde se puede ver toda su historia.